
Comenta J. R. Gil, este domingo en este diario, aunque quizá por error no esté abierto a comentarios de los lectores como es habitual, dice con mucho acierto y oportunidad las contradicciones y penurias por las que atraviesa en su periplo gobierno en puertas a la vez de otra importante cita del conclave valenciano para elegir a su nuevo secretario General.
Hace hincapié en las habilidades que han tenido personajes como Abalos ( apartado del partido a los primeros indicios judiciales), y otros más que no cita, para cabalgar y posicionarse como adalid de la apertura en falso del partido a la sociedad, con aquella llamada a implantar y desarrollar l Nueva socialdemocracia, listas abiertas para elegir a todos los cargos públicos y orgánicos, permitir, apertura la participación política con campañas que faciliten la entrada de afiliados, simpatizantes y votantes sin tener que pasar por la actúala Gestapo que controla el partido a través de sus redes clientelares las sedes subvencionadas del partido y así cumplan la función para la que han sido creados, abriendo las sedes a las actividades socio políticas, charlas debates, acciones culturales ect. Pero no es así, solo hay que ver lo que representan las sedes de todos los partidos políticos, una verdadera amalgama clientelar en manos de unos cuantos profesionales de la política del antes y del ahora, a la espera de que les toque cacho en algún cargo o enchufe a repartir por los jefezuelos que controlan los partidos cerrados a cal y canto, para que siendo pocos los conflictos internos de apertura democrática pasen lo más desapercibidos posible, siempre en manos de los mismos, vean el ejemplo de Alicante y Elche, que a la vez su ínfimas agrupaciones consiguen tener una influencia endogámica de primer nivel, como lo es para elegir a su próximo S.G.
Tan necesario era el cambio de implantar las primarias al menos para sus militantes, aunque se prometió abierta a simpatizantes que se pudieran inscribir en el censo, para consolidar la apertura real del partido a la sociedad. Como fallida ha sido en parte una vez más, el control de timón en quienes más se había confiado para ello una vez logrado el objetivo que se perseguía.
No obstante señor Gil, creo y le animo a ser más optimista en el futuro de este necesario cambio. Reconciliar los territorios y en especial el catalán tan denostado por la derecha radical que dio lugar a estas tempestades que hay que calma. La prueba es que apenas tienen votantes en territorios como Cataluña y el País Vasco y ello prácticamente les hace imposible gobernar democráticamente. Recuerde como Aznar en muy pocos días llego a pactos que ahora se ven impensables para gobernar. Por lo tanto las contradicciones y la falta a la verdad están en boca y manos de todos.
Mire usted señor Gil, y de esto sabe usted mucho y más que casi todos. La vida política y la democracia están hechas trizas, y se va para adelante con mínimos.
La justicia europea hasta la fecha todo han sido varapalos a la española por su represión y forma de enfocar el problema creado en Cataluña, precisamente por el P.P. al obstaculizar su actualización del estatuto de autonomía. Vea como en el país vasco a pesar de todo, no existe conflicto actual de independencia, en las últimas elecciones el trasvase de estos a partidos nacionales más sensibles ha sido muy significativo en Cataluña, algo querrá decir.
La alternativa del P.P. y Vox a nivel nacional ya lo ven, exasperando el conflicto permanente sin aportar soluciones a los problemas reales de los ciudadanos, como lo son la vivienda, la sanidad y el día a día en general. En estas cosas que son las verdades importantes las que valoramos los ciudadanos sobre todo, apenas tenemos esperanza para mejora el habitas y la democracia, por lo que estamos viendo.
¿Cuántos años aparcados estos temas sin solucionar desesperando a la gente? , ¿Hasta cuándo?
El último mandato del P.P. mejor no recordarlo, España y su partido todo un mar de corrupción de la más perima materia, ex ministros encausados en los más inesperados e insólitos procesos, un valiente y admirado juez, Baltasar Garzón, y otros alejados de la judicatura por investigar de más los escandalosos entramados.
¿Van a dar lugar así unos y otros a que fuerzas y movimientos reaccionarios populistas que puedan poner en peligro la democracia y las libertades con cantos de sirena, se aprovechen de la desesperación de amplios sectores excluidos, cada vez más alejados de la política cotidiana, voten a cualquiera con tal de intentar que sean efectivos la solucionan a los problemas que verdaderamente acucian a los ciudadanos?
Como está ocurriendo en muchos países del hemisferio, aunque después se arrepientan y haya que volver de nuevo a empezar con el ciclo.
https://www.informacion.es/opinion/2024/03/03/abalos-tenia-98935785.html

