Se continúa incumpliendo los mandatos constitucionales, todos los grupos políticos incumplen esta premisa de urgencia inmediata, la obviedad sobre los sectores profesionales, para que podamos participar y exponer las verdaderas soluciones, continúan siendo patentes y alarmantes.
Los Avales ICO, que son parte de la solución, no se desarrollan, los convenios con las entidades financieras privadas a falta de una banca publica son apremiantes.
Con ello se facilitaría a buen seguro el acceso a miles de ciudadanos, embalsados en el alquiler que desearían tener una en propiedad. Ello ayudaría mucho a pinchar la burbuja existente sobre los precios de los alquileres al restar esta numerosa demanda.
Paralelamente incentivaría la construcción y rehabilitación de viviendas por parte de las pymes, generando a la vez empleo.
El gobierno de la Generalitat con el P.P. ha vuelto a incumplir su promesa electoral de reducir el ITP, al 3% para jóvenes y colectivos especiales.
Se sigue sin facilitar avales públicos a las familias para facilitarles el acceso a la vivienda en alquiler, dejando así un auténtico ejército de errantes demandantes de vivienda social en alquiler, que por desgracia algunos no tienen más camino que ser okupas.
Ustedes mismos analicen el Plan Vive, que emana del nefasto Plan estatal de vivienda 2.022-2.025, que prevé subvenciones directas a los grandes operadores y fondos de inversión con el objeto de alquilar esas viviendas, cuando a todas luces esa subvención o bien la cesión del suelo público previsto permite destinarlas directamente a los propios demandantes de vivienda habitual y social en propiedad.
La encuesta del CIS dice un 81.8% es partidario de comprar una vivienda propia, ya que es la mejor forma de ahorrar para el futuro y evitar no poder pagar un alquiler a su jubilación, más con los contratos limitados aun máximo de 7 años.
Ejemplos actuales tenemos muchos, desde la actuación de los fondos buitres en Madrid y otros lugares, a lo último que desahucian de un convento en Cádiz, a sus trabajadores de toda la vida, así como a incapacitados y vulnerables de todo tipo en toda España.
Por desgracia esta es la actual política de vivienda que unos y otros nos ofrecen, entre ellas una errónea y enmarañada ley de vivienda que siquiera contempla el Derecho subjetivo.