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Crisis de la Vivienda: Propuestas Urgentes para un Plan de Choque

La crisis de acceso a la vivienda en España ha alcanzado niveles dramáticos, posicionándose entre los problemas más graves para la población, junto al empleo y la salud. El relator de la ONU y el Defensor del Pueblo han advertido sobre la gravedad de la situación, mientras que colectivos como la PAH llevan años exigiendo soluciones. Ante este panorama, se hace imprescindible la adopción de medidas inmediatas que conformen un plan de choque frente a la emergencia habitacional.

1. Decreto de congelación de alquileres
Es vital implementar un decreto de congelación temporal de los alquileres por un año, de forma que los nuevos contratos se realicen a un precio medio basado en las fianzas depositadas en las comunidades autónomas. Esto aliviaría la presión sobre los demandantes, facilitando el acceso a viviendas más asequibles mientras se estabilizan los precios desorbitados del mercado. A su vez, esta medida ayudaría a mitigar la burbuja de alquileres, un problema que ha afectado gravemente a las familias y estudiantes.

2. Viviendas de protección oficial a precio tasado (VPT)
El sistema de Viviendas de Protección Tasada (VPT) debe ser prioritario en la agenda política. Sin embargo, los avales y ayudas necesarias para acceder a estas viviendas no se han implementado de forma permanente; más bien han sido extemporáneas, complejas y, como el bono joven, llegan tarde, cuando lo lógico sería que se abonasen a tiempo, coincidiendo con el pago de la renta para que cumplan su función. Es esencial que el ICO y la banca privada formalicen convenios que permitan facilitar el acceso a la compra o alquiler de estas viviendas con cuotas accesibles.

3. Exoneración y modificación de tasas y desgravaciones
Es necesario exonerar temporalmente de tasas la rehabilitación y reforma de viviendas y edificios incluidos en los PGOU para incentivar su inmediata ejecución. Además, se debe permitir desgravar el 100% del IRPF y del IBI a arrendadores que alquilen a familias vulnerables con hijos, quienes actualmente se ven discriminadas por el temor de los propietarios a la ley de vivienda que protege a los inquilinos de desahucios. En paralelo, se propone eliminar estas desgravaciones para quienes no estén en situación de bajos ingresos e incrementar el IBI y el IRPF al 100% en el caso de viviendas vacías, eximiendo las segundas residencias.

4. Apoyo a las PYMES para reactivar el mercado y dinamizar la construcción local
La reactivación del mercado inmobiliario debe pasar por las PYMES, las más afectadas por la crisis. Estas empresas tienen más facilidad para poner en marcha proyectos de rehabilitación de solares urbanos y casas disponibles de inmediato, incluidos en los PGOU, en lugar de nuevos desarrollos que podrían tardar años en materializarse. En este contexto de urgencia, las PYMES son esenciales para dinamizar la economía local y resolver, a corto plazo, la crisis habitacional.

5. Alternativas a la banca privada
La colaboración entre la banca pública, Correos y el ICO puede crear un polo financiero de apoyo a las políticas de vivienda, facilitando el acceso a crédito a familias vulnerables. Caixabank, con un 17% de participación pública, podría jugar un papel clave en este proceso, estableciendo una alternativa más viable que la financiación privada, permitiendo acceder a hipotecas con mejores condiciones.

6. Efectos colaterales de la crisis habitacional
El crecimiento descontrolado de los alquileres turísticos, el aumento de ocupaciones y la precariedad en el acceso a la vivienda para estudiantes son algunos de los efectos colaterales de la crisis habitacional. Estos problemas, que surgen de la falta de viviendas disponibles, agravan la situación de colectivos vulnerables y aumentan la tensión en el mercado inmobiliario. Incluso, en situaciones extremas, la desesperación ha llevado a un preocupante incremento de suicidios relacionados con la imposibilidad de acceder a una vivienda digna.

7. Conclusión
La crisis de la vivienda en España requiere un cambio de paradigma. Las soluciones propuestas deben incluir tanto el alquiler como la compra en condiciones accesibles, priorizando la estabilidad y el bienestar de los ciudadanos. La implementación de un plan de choque con medidas claras y efectivas, como la congelación de alquileres, la dinamización del mercado a través de las PYMES y la recuperación de una banca pública comprometida con el acceso a la vivienda, es esencial para garantizar que la vivienda deje de ser un lujo y se convierta en un derecho.